Este martes se dio a conocer el resolutivo del Tribunal Electoral del Estado de Durango, sobre la impugnación que, José Ramón Enríquez Herrera, hiciera sobre el desfavorable resultado en el proceso para la designación de la candidatura de Morena a la gubernatura del estado, donde resultó que Marina Vitela encabezará el proyecto, la cual ya había sido impugnada ante la Comisión de Honor y Justicia del partidocon el argumento de que ‘el Doctor’ lideró las encuestas, misma que fue sobreseída.

A pesar de que algunos, cercanos al Doctor Enríquez, salieron a pregonar que el Tribunal había resuelto en favor del oftalmólogo, asegurando que se obligaba al partido a cambiar el resultado del proceso, esto es del todo falso, pues el órgano judicial local especializado en temas electorales, solo ordena que se emita una nueva resolución en la que, sin tener que modificar el resultado, donde se le explique al quejoso, porqué ese instituto político, no lo quiere de candidato.

Nuevamente, como única estrategia del desdeñado aspirante y de su equipo, se busca comunicar a la sociedad que se revertirá la candidatura de Marina, algo que ya nadie creyó, pues ha sido tanto el juego de simulación y de generar percepción entre verdades a medias e incluso mentiras que, a la mayoría de los ciudadanos, cualquier tema que involucre a Enríquez Herrera, ya no causa sino engorro y hastío. La estrategia, quizá, sería buscar debilitar su candidatura, pero el efecto logrado ha sido contrario, pues con tal de que ya se baje del tren, hasta seguidores del proyecto del Doc, han cerrado filas con Marina, respaldando su designación.

A la precandidata única, seguramente, ni le quita el sueño, pues aún si en algún momento del proceso jurídico, la autoridad instruyera reponer el proceso de designación, éste podría hacerse de manera directa, sin tener porqué tomar en cuenta los resultados de ninguna encuesta, dejando, una vez más, sin ninguna oportunidad de competir al senador. Además, este agónico pataleo, le permitirá a Vitela Rodríguez, seguir vigente en los medios, a pesar del restrictivo periodo de intercampañas, donde seguirá siendo mencionada y será publicidad gratis, sin que con ello viole el periodo prohibitivo.

Al final, Marina va, porque va, pues está claro que al presidente de le República le interesa hacerse con el control absoluto en los estados y, fuera de Quintana Roo y Oaxaca, donde prácticamente es un hecho el triunfo morenista; y en Aguascalientes, donde es un hecho que no compiten contra la candidata panista, seguramente defenderá, con todo el poder a su mano, los triunfos de Durango, Tamaulipas e Hidalgo, y no permitirá que asuntos de rejegos y quejosos, puedan interponerse en sus pretensiones. Mientras tanto, en Durango el tema de las preferencias electorales se encuentra muy cerrado y todo parece indicar que, en las campañas, habrá que echar toda la carne al asador, pues cualquier ventaja dada al adversario, seguramente será capitalizada.