El estado de Durango cuenta con una población de poco más de 1 millón 832 mil 650 habitantes, según los datos del último censo, de los cuales, poco más 1.3 millones se encontraban inscritos en el padrón electoral y prácticamente la mitad, asistieron a depositar su voto en las urnas el pasado 5 de junio. Por primera vez, se enfrentaron dos grandes coaliciones que absorbieron prácticamente todos los partidos políticos, dejando la contienda con solo 3 candidatos. La elección se antojaba cerrada y compleja, al grado que algunos se atrevían a decir que, seguramente, terminaría en tribunales. Nada de eso pasó, pues la ventaja del ganador fue definitiva.
Pero ¿qué pasó en Durango para que Morena no lograra poner otro pin guinda en el mapa? Recordarán que hace tiempo me atrevía a decir que, Durango, era el cuarto estado con la menor aprobación de las políticas y gobierno de Andrés Manuel López Obrador; lo que, aunado a una campaña plagada de errores, con candidatos impuestos que nunca lograron sanar las heridas causadas al interior y con una soberbia que les nubló la vista y les hizo creer que, como en 2018, solo se trataba de inscribirse y gozar del arrastre que genera el ahora presidente de la República. Craso error. Hoy Morena y sus aliados van a gobernar 18 municipios que representarán tan solo el 15 por ciento de la población; menos de 300 mil habitantes. Incluso gobernarán a menos personas que durante el periodo 2019-2022, cuando Morena, en solitario, gobernaba tan solo Gómez Palacio y Otáez.
En cambio, entre PAN, PRI y PRD, gobernarán a más de 1 millón 500 mil habitantes, es decir, casi el 85 por ciento del total. Además, evidentemente, que la totalidad del estado se encontrará bajo el mando de Esteban Villegas Villarreal, quien ocupará la máxima magistratura a partir del 15 de septiembre. Esta elección convirtió a Esteban en el duranguense que más votos ha recibido en la historia de Durango, con 370 mil 924 votos, ganado además en los 15 distritos que componen nuestra geografía electoral. Este domingo, le fue entregada su «Constancia de mayoría» que lo acredita como gobernador electo, al tiempo que refrendó su compromiso para hacer un gran gobierno, integrando un equipo con los mejores perfiles para potenciar el desarrollo de las distintas regiones del estado y garantizó que contendrá el 50 por ciento de mujeres en su gabinete, por una cuestión que va más allá de la cuota de género, sino porque en Durango hay muchas mujeres muy capaces y comprometidas con el desarrollo de la entidad.
Esteban hoy se ha convertido, además, en un liderazgo muy importante a nivel nacional, pues el triunfo lo posiciona como uno de los priistas más importantes del país; lo que, por cierto, es una ventaja para quienes habitamos esta bella tierra, pues evita que Durango caiga en el olvido nuevamente, después de haber sido el foco de atención de prácticamente todos los niveles durante la campaña, dando la oportunidad de que, si bien no será necesario que se confronte a la federación, sí le permitirá tener una voz con mucho más peso para darnos el lugar que merecemos y que tanto hemos peleado a lo largo de la historia. En fin, que venga lo mejor para todos.