Luego de la larga sesión que sostuvieron los consejeros del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana el pasado miércoles, en donde se discutieran catorce puntos, entre acciones afirmativas, lineamientos del voto en el extranjero, el calendario electoral, los lineamientos para la paridad de género, el presupuesto, entre otros; se modificó el calendario del proceso que está en puerta, una vez que el Instituto Nacional Electoral ejerció su facultad para homologar las fechas de conclusión de precampañas al 10 de febrero de 2022, en los seis estados en los que se habrán de realizar la renovación de 6 gubernaturas, 39 ayuntamientos y 25 diputaciones, por motivo de la fiscalización que realiza.

Por ello, la precampaña para la gubernatura de nuestro estado, que originalmente estaba dispuesta del 21 de noviembre al 30 de diciembre de 2021, se recorrió del 2 de enero al 10 de febrero de 2022, lo que modificó la fecha fatal para la solicitud de registro de convenio de coalición para la gubernatura que, del 21 de noviembre de 2021, pasó al 2 de enero de 2022. Otro tema importante es que, para el cálculo del financiamiento de los partidos en 2023, el IEPC definió que serán los resultados del proceso en el que se renovaron las diputaciones locales este 6 de junio pasado las que se tomarán en cuenta, y no las del próximo proceso electoral, lo que seguro jugará un papel importante en la definición de algunos partidos para decidir si participarán en solitario; pero el Instituto también precisó que un partido nacional podría perder su acreditación si decide no participar o si no obtiene el 3 por ciento de la votación en el siguiente proceso, lo que prácticamente orilla a los institutos políticos a considerar estar en las boletas el próximo año.

La modificación del calendario, forzosamente, habrá de darle un ingrediente más al proceso, pues al extenderse el plazo, es posible que los partidos decidan utilizar más tiempo para seguir con el ‘estira y afloja’ en la conformación de las dos grandes coaliciones que se vislumbran al día de hoy, aunque seguramente habrán de registrar sus proyectos de coalición antes de que concluya el año, para tener ‘colchón’ para solventar cualquier situación jurídica y/o administrativa antes de la fecha final. Sin embargo, patear el bote y hacer más larga la agonía e incertidumbre de quienes han buscado encabezar los proyectos electorales de cada uno de los partidos, tendrá efectos negativos en sus perfiles y en la conformación de estrategias de ‘sanación’, pues habrá de aumentar el desgaste, agotar los presupuestos y hasta aumentar las rencillas y provocar heridas más profundas en aquellos que no se sientan correspondidos. En el ‘a ver de qué cuero salen más correas’, también vamos a ver quién tiene más grueso el ‘cochinito’ y la piel más gruesa, para aguantar estirar la liga sin que se les reviente.