La frase con la que se titula la columna, se le adjudica a Benjamín Franklin, quien fuera político y personaje destacado de la historia americana. Sin duda, viene como anillo al dedo al hablar de triunfos políticos, ya que no siempre se consiguen los objetivos a la primera y solo aquellos que perseveran y recomponen, alcanzan los resultados que anhelan. Muestras hay muchas y quizá uno de los ejemplos más redundantes en la memoria popular, sea Andrés Manuel López Obrador, quién, hizo campaña para la Presidencia de la República en 3 ocasiones, situación que seguramente pocos habrían perseguido y qué, de no haber logrado su objetivo, no sabemos si hubiera buscado una cuarta oportunidad, como fue el caso del Cuauhtémoc Cárdenas.
Esto viene a colación, porque en las pasadas elecciones, varios candidatos de distintas entidades y partidos, buscaron hasta por tercera ocasión la gubernatura. Por ejemplo, en Quintana Roo, José Luis Pech, se cambió de MORENA a Movimiento Ciudadano, para contender por segunda ocasión. En Hidalgo, Francisco Xavier, prácticamente ha estado en todas las fuerzas políticas, compitió por tercera ocasión para la gubernatura también por la marca naranja, la única que le quedaba. En Durango, Esteban Villegas, fue el abanderado de la alianza va por México, sin embargo, entre estos tres candidatos hay enormes diferencias, para empezar, los primeros dos no ganaron y consiguieron la menor cantidad de votos en las entidades que compitieron. Mientras que, en Durango, Esteban Villegas, no solo ganó la elección, sino que rompió todos los records de la jornada, para empezar, es el único priista elegido en los pasados comicios, aventajó a su contendiente más cercana por más de 100,00 votos, sumando una cifra ya oficial que supera 370,000sufragios, lo que lo convierte en el político con la mayor cantidad de votos en la historia del estado; y ganó 15 distritos de 15, más allá de comparativos, lo alcanzado por Esteban Villegas, no es poca cosa, en realidad, es un referente que lo ubica como un liderazgo del priismo nacional y no estoy exagerando, esto quedó por sentado en el Consejo político Nacional del PRI celebrado el pasado miércoles, donde el aplausómetro, vivas y afecto fue notorio hacia el duranguense.
Esteban llega a la gubernatura en una circunstancia política adversa para el tricolor, sin embargo, esta misma situación lo ubica en una posición privilegiada a nivel nacional; en este momento, es el único priista que le ganó a MORENA en las pasadas elecciones y pasa a ser el gobernador número 3 de esta marca, pero, de esos 3, Coahuila y EDOMEX tendrán elecciones el próximo año y todo parece indicar que MORENA arrebatará el Estado de México y Coahuila no será una batalla sencilla tampoco. Esta situación política en el país, desdobla una hipótesis muy interesante; Esteban Villegas puede llegar a ser el único gobernador priista de México, lo que le brindaría un liderazgo automático a nivel nacional y catapultaría en el pandero político, centrando atención mediática y gubernamental en Durango y las acciones de su administración. Bien dijo el oriundo de San Juan del Río en su discurso triunfal, “terminamos lo difícil para comenzar con lo más difícil”. Las expectativas son muchas y el mensaje que emitió Esteban ante el pleno de Insurgentes norte, no es poca cosa, habrá que privilegiar el trabajo con humildad y por encima de intereses personales. Por lo pronto deberá conformar el mejor gabinete que Durango pueda ofrecer ya que no solo será para el estado, sino para todo México.