En Morena hay un tremendo problema… bueno, quizá más de uno, pero el más apremiante es cómo sostenerse como marca en las preferencias, a pesar de sus grandes incongruencias, en lo que resta del presente sexenio. Y es que, por un lado, mientras su ‘Mesías’ pregonó la necesidad de un cambio, acusando los excesos de los gobiernos porque, según decía, utilizaban el poder para el beneficio de unos cuantos y, aunque eso no era ni ajeno ni lejano a la realidad pues los grupos en el gobierno buscaban mantener el poder a costa de lo que sea, a más de tres años de gobierno de Andrés Manuel López Obrador, la cosa no es distinta. Para muestra, la próxima consulta sobre la revocación de mandato, en la que a pesar de la lucha social en la que se logró evitar que los gobiernos incidieran, desde el poder, en la decisión de los ciudadanos frente a la urna y la publicidad gubernamental no fuera un factor de influencia; hoy, Morena y sus aliados se han convertido en lo que juraban destruir, no solo con espectaculares insidiosos, panfletos mentirosos o tiempo de radio y televisión excesiva, sino por la forma tan criminal de hacerlo, como condicionar la continuidad de los programas sociales, como si no hubiera existido Solidaridad, Oportunidades, Progresa, Procampo, Diconsa, las Cruzada contra el Hambre, Prospera, el Seguro Popular; o incluso la gratuidad de las vacunas, que siempre lo han sido y lo serán, al color de un partido.

Pero entre eso, los casos de presunta corrupción en la propia familia presidencial, el abuso cometido desde la Fiscalía General de la República y lo que acaba de exponer el propio Julio Scherer, con un largo etcétera; tendrá que ser motivo de desmarque para los candidatos a las seis gubernaturas, las 39 alcaldías y las 25 diputaciones que estarán en juego este próximo 5 de junio, pues son muchos frentes políticos y sociales que podrían debilitar cualquier campaña que se muestre endeble, tomando en cuenta que muchos en la cuatroté, no tienen mucha experiencia electoral.

Pero, para ello, ¿echarán mano de sus aliados? En Durango, por ejemplo, hace unos meses las Redes Sociales Progresistas se llenaron la boca con consignas contra el gobierno federal y su falta de resultados. A Gonzalo y el PT los criticaron duramente en cada uno de los 15 debates organizados por el IEPC el año pasado. ¿Ahora serán defensores, también, de Marina Vitela y su equipo? Pareciera que solo buscan subsistir. 

Hablando de sobrevivientes, el Partido Verde, aquel gran socio y beneficiario de los gobiernos neoliberales de los que se habla pestes a diario desde Palacio Nacional y que son la gran sanguijuela de nuestro Sistema Político Nacional… ¿se darán baños de pureza atacando a la vaca sagrada de la que tomaron tanta leche? Será interesante ver cómo, con lo que llevan en sus hombros por ser parte de un presidente que cada vez convence a menos, y con el pesado pasado de sus aliados que los ha llevado a buscar aliarse, una y otra vez, logran convencer a la gente, no solo de su proyecto de gobierno, sino de salir a votar.