¿Cuánta generosidad debemos agradecer para quienes dirigen un partido político en Durango? Tenemos a la vista y conocimiento, un sinfín de ejemplos para reiterar el descontento al trato que se les da desde las dirigencias a las bases de sus propias militancias. Cuando se engrosó aquella militancia y defensores de Morena, no hace más de cinco años entre los perfiles más ovacionados desde el propio priísmoque se dejaba caer en las últimas preferencias ciudadanas, cuando gozaba de credibilidad la frase “LA ESPERANZA”. La ciudadanía creía en la propuesta MORENA, que ellos fueran los que los acercaría a lo que tanto anhelan: UN CAMBIO.

​Los duranguenses aclamaban un cambio desde el 2016 apostando con todo y propios priístas orquestados para darle el triunfo a un PAN con Movimiento Ciudadano; nuevamente volvemos a los clamores de la exigencia del CAMBIO y a la frase: “Estábamos mejor cuando estábamos peor”, ¿no les resulta decepcionante e indignante este pensamiento? Nuevamente se le apuesta a una ALIANZA con los partidos que por historia fueron antagónicos por esencia pero que por intereses a modo hoy van de la mano. Lo único que se ha mantenido en la constante es que se asegura la prosperidad para las mismas familias que desde el PRI han asegurado hasta la tercera generación espacios y PRIvilegios que no son propios de una militancia activa y de los personajes que dejaron su vida y su empeño por evolucionar como una nación rica en recursos tanto naturales como académicos.  

El descontento de las bases son silenciadas y en el mejor de los casos son compradas por un miserable pago quincenal que no les favorecerá ni alcanzará para una vejez digna. 

Hoy nuestra entidad se ha desnudado y deja ver un esqueleto hasta descalcificado, pero esos HUESOS que aún contienen algo de movilidad son para las familias y sus cercanos que han dejado de vitaminar la necesidad de un gobierno humano y con oportunidades para la ciudadanía en general. Los que una vez fueron disidentes hoy están alineados y cobijados por un poder magnánimo donde deja en claro que para aquel que aspire y no sea de la familia o del grupo debe tener en claro que NO se llega por mérito propio, no se acercará jamás  “haciéndolo bien”. No dudo para nada y mucho menos subestimo la capacidad académica de los hijos de políticos que hoy se les ha tomado protesta para tomar las riendas de nuestro Durango, porque se han capacitado en los mejores institutos tanto nacionales como extranjeros, pero la pregunta siempre será: ¿tu militancia es para prostituirse cada 3 o 6 meses?

¿La deshumanización alcanza niveles tan altos para condenar a las bases a la pobreza para mantener familias enteras excusando un nepotismo que en letra y discurso apesta?

Vivir romantizando lo que nunca se dio pero nos resulta glorioso imaginar como podría escribirse una historia cual novela para un pueblo ignorante y triste es destinar a un Colosio JUNIOR a heredarle un trono para naturalizar la corrupción y la impunidad para darle continuidad a los cuentos con un final feliz, es lo mismo que sucede al ver como se heredan los espacios para los de SIEMPRE QUE NO HAN HECHO NADA DIFERENTE. 

¡Todo tiene un límite menos la estupidez, Durango despierta!