La diputada local, Rosa María Triana Martínez, presentó la iniciativa de reformas a la Ley General de Educación, con la finalidad que se destine el presupuesto anual para el programa de “Escuelas de Tiempo Completo”, el cual no podrá disminuir de un año a otro.
Además, se tendrá que considerar forzosamente la cobertura de los pagos suplementarios para personal docente y administrativo en razón del horario extendido de la jornada escolar, así como los recursos para otorgar una comida diaria a los alumnos de las escuelas.
En Durango, las Escuelas de Tiempo Completo brindaban atención a cerca de 94 mil los alumnos, de ellos, 17 mil corresponden a la zona indígena, programa que tenía como eje principal el servicio de alimentación de los educandos.
Se ha estimado que alrededor de un 70 por cientode las escuelas participantes se encuentran en zonas indígenas y rurales, y el 55 por ciento de los niños bajo el manto de este programa viven por debajo de la línea de pobreza.
Sin embargo, con el éxito del programa y su reconocimiento internacional, en este año 2022, se ha ordenado la desaparición del programa en todo el país, lo que ha acarreado una serie de manifestaciones de preocupación por parte de especialistas, académicos y de la sociedad en general, respecto a las consecuencias de dicha decisión en perjuicio de la niñez y juventud de México.
De esta manera, se deja de apoyar a 3.6 millones de niños en condiciones de pobreza; privándolos de alimentación, de desarrollo y se dejará de impartir entre 1.5 y 3.5 horas de clases suplementarias, desde música, arte, deporte o lenguas extranjeras.